La Emoción de Regalar

¿Ya tienes tu lista de deseos completa? ¿Qué es lo que pusiste en tu lista de este año? ¿Un iPhone 6, una Playstation 5 o quieres tu regalo de algun super heroe favorito para Navidad?

Vivimos en una sociedad en la que estamos siempre en busca de cosas nuevas para adquirirlas. El último teléfono, ropa de moda y los carros más rápidos. Todos conocemos la sensación de tener ese nuevo reloj que te impactó desde hace mucho tiempo; recibir regalos es grandioso. Pero por lo general no pasa mucho tiempo antes de que comencemos a pensar en que es lo siguiente que deseamos adquirir, ¿Verdad?

Las Celebraciones que nos motivan a compartir están a la vuelta de la esquina. En sólo un par de semanas mucha gente estará celebrando la Navidad. Diciembre es un buen momento para reflexionar sobre todas las bendiciones que tenemos y compartir con nuestros seres queridos. Sabemos que recibir es grandioso, ¿Pero qué hay acerca de dar? A veces la alegría de dar un regalo a tus seres queridos puede ser aún mayor que la de recibir uno. Hoy vamos a compartir con ustedes tres beneficios del dar y compartir.

1. El dar es divertido. Sorprenda a un amigo con un regalo inesperado, lleve un ramo de flores a tu madre, ayude a tu vecino, lleve un pastel para tus colegas o regala algo que usted no usa más a alguien que podría usarlo. Dar no sólo hace que el que reciba un regalo sea feliz, sino que también aumenta su propia felicidad. ¿Sabías que este fenómeno incluso tiene un nombre? La “emoción” que se experimenta después de un acto desinteresado se conoce como el “helper’s high“y la investigación ha demostrado que las personas que realizan actos desinteresados ​​de manera frecuente son más felices que las personas que no lo hacen.

2. Mucha gente piensa que sólo se puede dar y compartir cuando se posee mucho. Cuando se tiene un montón de dinero o un montón de cosas materiales para compartir. ¿Sabías que el dar no siempre tiene que costar (una gran cantidad de) dinero? La mayoría de las personas tienen una necesidad de reconocimiento, por ejemplo. Un elogio sincero es algo que se puede dar de forma gratuita. Las cosas más valiosas no cuestan nada. Entonces, ¿Qué estás esperando? Comienza haciendo halagos a un amigo por sus grandes habilidades en la cocina o a un colega por el excelente trabajo que realizó.
Si diriges un equipo de trabajo y tienes personas que dependen de tu liderazgo te recomendamos “ 1001 Ways to reward Employees”. By Bob Nelson. Te sorprenderas que no es necesario siempre involucrar dinero.

3. Otro de los beneficios de dar sin esperar nada a cambio es que al mostrar a la gente generosidad, usted comenzará a ver cómo la gente que le rodea, llega a ser también más generosa. Un solo acto de bondad típicamente inspira varios actos de generosidad más. Hay incluso un nombre para eso y se llama “upstream reciprocity”. Esto significa que las personas que son objeto de un acto de bondad quieren seguir retribuyendo por ese acto. Alguien que acaba de recibir algo (por ejemplo ayuda) es más propenso a ayudar a alguien más. Tu pequeño acto de generosidad puede contribuir a uno mucho más grande y a causar el efecto de crear una cadena de buenos actos.

Así que ahora sabemos por qué es bueno dar y compartir con los demás. Cuando cambiamos del enfoque materialista de estas fiestas por una vida de dar y compartir, nos volvemos más feliz. ¿Entonces, Qué esperas? No esperes más y empieza a realizar pequeños actos de bondad y generosidad hoy.